Encuentra tus gafas perfectas: asesoramiento según el rostro y tono de piel

Los distintos estilos de monturas y cristales, tanto para gafas graduadas como de sol, no solo cumplen una función práctica sino que son un complemento estético. En este sentido, teniendo en cuenta la amplia variedad de modelos y diseños existentes, existen opciones particulares que son las mejores o más recomendables para determinadas personas; en general, el rostro y el tono de la piel son dos de los criterios básicos a la hora de elegir un par de gafas ideal para ti.

Asesoramiento según el rostro

En muchas ocasiones, las personas acuden a la óptica atraídas por un par de gafas en concreto que han visto en el catálogo o, actualmente, en publicaciones de las redes sociales. Sin embargo, a la hora de probar ese modelo en particular observan que no les sienta del modo que habían pensado. Existen muchas razones y es algo muy común. En general, hay algunos criterios generales que deben tenerse en cuenta para elegir las gafas adecuadas según la forma de tu rostro:

  • En personas cuyo rostro tiende a formas ovaladas, buena parte de los estilos existentes es una buena opción. En general, es el tipo de rostro con más posibilidades en este sentido. Por otro lado, cuando nuestro rostro es más bien redondo, es recomendable optar por gafas cuadradas o rectangulares que matizan la suavidad de este tipo de rostro.
  • Cuando se trata de personas con rasgos más pronunciados y formas que tienden a lo cuadrado, es mucho más interesante optar por gafas redondas y monturas algo más anchas que la línea de la mandíbula. 

En cualquier caso, es importante tener en cuenta que esto son tan solo criterios generales y que lo más recomendable es verlo en persona en la óptica. De este modo, podremos asesorarte de forma específica sobre las monturas disponibles que pueden ajustarse de forma perfecta a tu tipo de rostro. Además, es muy posible que existan pequeñas variedades y matices en las distintas monturas que puedan potenciar tus rasgos y que no se perciban si no te pruebas las gafas.

Asesoramiento según el tono de piel

Por otro lado, el tono de piel es otro de los rasgos más importantes para adaptar el estilo de tus gafas. En este caso, hay algunas claves que debes conocer:

  • Si tienes un tono de piel cálido con matices dorados o amarillos, las monturas en tonos tierra – marrón, ámbar o dorado– resaltarán tu belleza natural. También puedes considerar monturas en tonos cálidos como el naranja o el coral.
  • Para tonos de piel con matices rosados o azulados, las monturas en tonos fríos –negro, plateado o azul marino– pueden complementar tu tez. También puedes optar por monturas en colores vivos como el morado o el verde esmeralda para un toque de contraste.
  • Si tu tono de piel no tiene matices predominantes cálidos o fríos, tienes la libertad de experimentar con una amplia gama de colores de monturas. Desde clásicos como el negro y el marrón hasta opciones más audaces como el rojo o el blanco, el mundo de las gafas está abierto para que explores.

Del mismo modo que sucede con el tipo de rostro, es fundamental probar cada montura de forma individual. En la óptica tendrás muchas más opciones para comparar, probar varias veces, revisar los detalles y observar los matices. Además, muchos de los modelos que te podemos recomendar quizás no llamarían tu atención en un primer momento, pero pueden conquistarte una vez los pruebes.

A partir de tus intereses, tus gustos, tu personalidad, así como tu rostro y tono de piel, podremos guiarte y asesorarte de forma específica para que encuentres el par de gafas que mejor encaja contigo. La experiencia hace que tengamos mucha capacidad para orientarte en cuestiones que, quizás, pasan desapercibidas en un primer momento y que son muy importantes.